Soy Patricio Cañete, algunos me dicen Pato. Luego de 30 años en el mundo de las herramientas digitales y creando sitios web de todo tipo, he visto grandes cambios (Sí, cuando comencé, Internet recién se había inventado).
Antes, hacer un sitio web era complicado, pero hoy es más sencillo gracias a nuevas herramientas. También, gracias a las redes sociales, es más fácil que nunca crear y compartir contenidos, pero muy difícil lograr los resultados esperados. La vara está alta. Hoy se pueden crear contenidos o un sitio web de manera sencilla, incluso con IA. Pero lo que importa es la autoridad de quién emite el mensaje.
Tengo formación en ciencias económicas y más de 20 años de experiencia como profesor universitario en tecnologías y gestión empresarial. También he investigado, dado charlas y publicado artículos sobre digitalización y optimización empresarial.
He notado que las estrategias de marketing, y la digitalización de procesos en general, suelen fallar porque las empresas enfocan mal sus esfuerzos, priorizando herramientas sin una estrategia sólida. Contratan proveedores diferentes para el desarrollo web, la gestión de la marca y redes sociales, herramientas de automatización y sofware, pero sin tener claro qué es lo que deben hacer para alcanzar sus objetivos. Esto genera conflictos y fracasos.
El problema radica en que se delega la definición de estrategias a proveedores externos, algo que debería ser tarea de la dirección de la empresa. Esta falta de liderazgo estratégico es lo que lleva al fracaso de muchos proyectos.
Hoy la tecnología permite crear empresas enteras, donde la IA se puede hacer cargo de el 70% de los procesos de venta, delivery, pos-venta y soporte, pero para que eso sea posible tu empresa debe contar con los contenidos que le permitan actuar a la IA. Tu empresa puede convertirse en un autoservicio conversacional multicanal, las herramientas para lograrlo ya se encuentran disponibles.
Es posible contar con agentes que actúan como embajadores de tu marca interactuando con el entorno y por múltiples canales. Agentes con diferentes roles, realizando tareas o procesos internos, como ingenieros, asesores o asistentes. Y agentes personales encargados de ayudar a tu equipo en tareas diarias y operativas que demandan tiempo y energía.